Una concentración inigualable de megalitos
Majestuosos. Misteriosos. A veces ocultos, sumergidos bajo las mareas, estos monumentos de piedra están ahora inscritos en la Lista del Patrimonio Mundial de la UNESCO. Un reconocimiento internacional para este paisaje formado hace 7000 años, testigo de una ingeniería humana precoz y un vínculo único entre la tierra y el mar.
Más de 550 emplazamientos megalíticos, repartidos por todo el sur de Morbihan, se suman a los tesoros más preciados de la humanidad: es el primer emplazamiento bretón declarado Patrimonio de la Humanidad.
Esta inscripción consagra años de compromiso colectivo y abre una nueva página: la de un patrimonio legendario que hay que proteger, transmitir y descubrir con aún más respeto y admiración.
