Para salir a pescar atunes, el Biche te lleva a vivir una experiencia marítima que bien vale vivir una vez en la vida.
Este testigo de la pesca de atún con vela es el último representante de la epopeya de esta práctica. Y es lo que la tripulación se dispone a darte a conocer. En el océano, con los tangones alargados con pértigas flexibles que sujetan líneas de pesca y anzuelos con nombres pintorescos. Y resulta que pesca atunes como… si esa fuera su misión. El rumbo del velero se adapta sin interrupción a las necesidades de las líneas de pesca. El timonel responde a la menor indicación del patrón para seguir pescando a unos 5 o 6 nudos. Los volúmenes interiores permiten descansar y compartir la comida, porque el mar y la pesca abren un apetito de auténtico lobo de mar. La tensión de la vela rozando los diez nudos, la comodidad de sus formas y la emoción de la pesca: eso es el Biche.