Imagínese: pescado desembarcado en el puerto de Portivy, marisco cocinado a la perfección, un cerdo trabajado con pasión... Este restaurante, a las puertas de la costa salvaje de Quiberon, le ofrece lo mejor de la tierra y el mar de Bretaña.
El mismo enfoque eco-responsable, los mismos productos de calidad obtenidos lo más cerca posible de la península... pero cocinados en una versión más accesible. Pauline y Thomas Le Morlec se han hecho cargo del Petit Hôtel du Grand Large, rebautizado Rivage, en el puerto de Portivy, en Saint-Pierre Quiberon, y su objetivo es ofrecer recetas actuales para todos los gustos. Pageot sashimi, crema de berros, crème montée y humo de heno; ternera estofada, lombarda kalibos, salsa kimchi, chips de col rizada... La carta celebra los sabores de la tierra y del mar. La salchicha casera, con su puré de patata, jugo de verduras y tetragonia, se ha convertido en un "must". Una buena carta de vinos naturales. Y para los más golosos, ostras naturales, percebes, accras de pescado y rillettes de cerdo para picar tras las bonitas ventanas con asa de cesta, abiertas de par en par al mar.
