Siéntase como en casa en esta insólita casa de esclusero situada en el bosque de Branguily, a medio camino entre el golfo de Morbihan y la bahía de Saint-Brieuc.
Cierre los ojos y déjese arrullar por el chapoteo del agua. Tanto si se aloja en una "pequeña gabarra", en una caravana del parque o en una de las habitaciones de la casa del esclusero, empiece disfrutando del desayuno local que le llevarán a la puerta por la mañana. En Can'haltes no le faltarán actividades, como el alquiler de una barca de remos para navegar por las brillantes aguas del canal Nantes-Brest, un masaje energizante o una tarde de juegos de mesa en el salón de la casa de huéspedes. Uno de los estudios es accesible para personas con movilidad reducida. Desde el camping, podrá recorrer a pie o en bicicleta la "Balade des Fées" (Ruta de las Hadas), que serpentea por los bosques de los alrededores, o la "Ronde des Korrigans" (Ruta de los Korrigans), con sus observatorios dedicados a la rica flora y fauna locales.