Alrededor de la antigua posta de diligencias, se suman varios edificios para formar un oasis acogedor, en el corazón de Ille-et-Vilaine.
Como anuncia su nombre, el Lion d’Or es un hotel con carácter y mucha historia. Siempre al compás de su tiempo, ha evolucionado para convertirse en un agradable y cómodo hotel con 36 habitaciones de distintos estilos. Las habitaciones bungalows disponen de una terraza privada al jardín. Otras, repartidas en dos plantas, son espaciosas y dan al exterior. Cerca de la fuente, las antiguas cuadras albergan habitaciones con parqué y decoración sobria, entre tradición y modernidad. Podrás escoger entre dos restaurantes: bistró o semigastronómico. En este marco rodeado de flores, el parking privado facilita la llegada en coche. Entre Rennes, Fougères y Saint-Malo, el calendario de actividades familiares es inagotable.