Dulces sueños en un auténtico tren-cama de 1926 o en una auténtica yurta mongola. Disfrute de esta experiencia mágica en Morbihan, a 30 km de Concarneau y Pont-Aven.
Atraviese las puertas de la estación de Guiscriff, un lugar de encuentro acogedor donde nunca se aburrirá. Realice un auténtico viaje en el tiempo durmiendo en un magnífico tren-cama de 1926. Pase la noche en una de las cabinas para 2 ó 3 personas de este histórico vagón de casi 100 años... Sumérjase en otra época, gracias a la conservación de su aspecto y marquetería originales. En familia o con amigos, opte por la yurta mongola: un espacio cálido y comunitario, acondicionado con hermosos muebles pintados a mano. Disfrute de un paréntesis como si estuviera en el corazón de las estepas. En la estación de Guiscriff le espera una velada agradable y memorable. Después, disfrute de una visita al museo de la historia del tren o participe en el juego de escape temático.