A 400 metros de las playas de Batz-sur-Mer, disfruta de la brisa marina en familia, alojado en residencias todo confort dispuestas a lo largo de un parque ajardinado.
Las residencias con capacidad para 2-5 personas están agrupadas en 7 pequeñas aldeas separadas por vegetación, un buen equilibrio entre convivencia e intimidad. En verano, el pueblo se convierte en un club de vacaciones con actividades deportivas durante el día, noches temáticas y el indispensable club infantil. ¿Te gusta el dolce far niente, la piscina climatizada al aire libre, el tenis, la petanca, el billar, el futbolín...? ¡Ven y disfruta de unas vacaciones inolvidables! Batz-sur-Mer, con sus marismas, sus casas de salineros, sus amplias playas y sus calas escondidas ofrece un sinfín de posibilidades para los amantes de la naturaleza, la cultura y la gastronomía. Durante tu estancia, deja el coche en el parking, alquila una bici de montaña y sal a descubrir la península por las múltiples vías verdes que la recorren.









