De Plougonvelin a Plouzané
Salida: Punta de Créac’h
Llegada: Sainte-Anne du Portzic
Antes de llegar a la rada de Brest, sigue la línea de costa, que parece ahora más suave. La bahía de Trez-Hir y la ensenada de Bertheaume revelan sus encantos y sus spots de surf. Saliendo del páramo, los fuertes y los vestigios militares montan guardia pacíficamente. El faro del Petit Minou se alza solemne, listo para ser fotografiado. Vigila la bocana, el brazo de mar que une la rada de Brest con el Océano Atlántico. Desde el camino de la cornisa, la rada se despliega dejando a la vista Île Longue. A lo lejos, el baile de barcos zarpando de los puertos y las fachadas blancas de la ciudad de Brest.
Los gemelos bien… pero ¿y los brazos?
¡Los brazos para remar en el mar! En la ensenada de Bertheaume, únete a un equipo de remeros* para un paseo deportivo a ritmo de palada y disfruta como nunca de las focas y los delfines. Y, si eres de esas almas indómitas, puedes alquilar el material necesario en Brest Bretagne Nautisme.
* Con reserva previa, según disponibilidad
Nivel aficionado al deporte